miércoles, 24 de febrero de 2010
Se vistió para que lloviera
Se vistió para que lloviera. Buscó un sillón y se sentó a fumar. Se tocaba la cara con cuidado decidiendo que la edad era una segunda piel debajo de la primera, que peleaba por atravesarla. Al final, no soy más que un cuerpo que se extingue y lucha por disimularlo. Se rió: lo ya antiguo era la juventud; en cambio lo nuevo, como el musgo oscuro que crece envolviendo las rocas, era la edad. Pensar vejez no estaba en sus cálculos. Era una frase para decir. El patio estaba reseco, sucio, como aplastado por el aire viejo de todos los veranos en el patio. Antes de descubrir que atrincherado ahí en el silencio iba a morirse, tenía tiempo de pasar otro invierno y anidar aquel sol chiquito pero inquieto que pudiera hacerse mañana de fiesta. Nunca había funcionado, pero por lo menos se sabía la rutina de memoria, y siempre le dijeron que había que insistir. Porque hubo voces de aliento. Pero hubo una espalda inalcanzable.
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12 comentarios:
Por ahi de tanto intentar...Quien te dice que un día se hace un mañana de fiesta.
Que bien descripta esa imposibilidad de salir, de ponerse en accion, de estar atrincherado.
Gracias, Kolo. Yo sé que vos sabés muy bien cómo es esa imposibilidad.
muy bueno maricón no comentador...
escuchando 01 Jam Warm-Up\Creedence Clearwater Revival - Fantasy Session_1970
hundirse en el bajón es, a veces, demasiado tentador y, casi, placentero.
también peligroso, aunque no para un tipo brillante como vos.
debo reconocer que tu forma de bajar a los infiernos me resulta admirable: negro, negro, negro, nunca un gris
a ver cuándo nos juntamos a tomar unos mates
para mi con edulcorante...
escuchando 01 Immigrant Song\LED ZEPPELIN\1970- Led Zeppelin III
Paula, lo que decís estaría muy bien, si este post fuera una hoja de diario íntimo, o una consulta psicoanalítica. Pero no pretende nada de eso: es un texto. Es más, el borrador lo escribí hace como quince años, y ahora lo reformulé porque me pareció que tenía algún valor.
Claro que tiene algo que ver con cosas que me pasan, pero está mediatizado.
En cuanto a cómo bajar a los infiernos, y bueno, si no usás la palabra al menos para tirarte del todo, es como amagar y quedarte.
Poca-Onda-Iluso-No-Visitador: ese disco de Zeppeliin es el mejor!
ESTA CABEZA A CABEZA CON PHISICAL GRAFFITTI
sí, tal vez es la sensación que a mí me da cuando leo tus textos, es algo así como disfrutar del bajón, seguramente habré proyectado en vos una sensación que era mía
no hay nada peor que el mate con edulcorante
aguante sépelin!!!
no sabés lo que decís paula.-..
bueh!
é lo más...
Damián:
Gracias por el apoyo, en serio. Afortunadamente, yo no sufrí los desastres del terremoto. Vivo en Puerto Montt (décima región)y aquí sólo se sintió un temblor fuerte. Me asusté más que la cresta, jajaja, pero por aquí, todo bien. No así por las regiones más al norte. Gracias nuevamente por el aliento, son detalles que se agradecen enormemente.
Cuídate mucho y estamos en contacto.
Un abrazo enorme. Adiós, D.
Atte.
G.
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